Cuando compres, haz la diferencia
- La sociedad de hoy esta basada en el consumo, lo que significa que existe un gran poder adquisitivo. En la medida en que más personas compren productos ambientalmente amigables, los proveedores tendrán que responder a esta demanda. La próxima vez que compres, mira con cuidado las etiquetas de los productos y averiguando de dónde vienen y cómo fueron producidos.
- Compra alimentos producidos orgánicamente. El cultivo de productos no orgánicos necesita el uso de químicos que son dañinos como los pesticidas, que contaminan las fuentes de agua y además, son venenosos tanto para animales como para humanos.
- Cuando compres atún busca el sello “amigo del delfín” en la etiqueta de la lata. No consumas especies que estén en peligro y compra pescado de la zona.
Ejerce tu poder de consumo
- No compres productos que requieran o vengan en muchos empaques, y cuando sea posible, escoge productos que tenga empaques reutilizables.
- Compra atomizadores de acción manual en vez de aerosoles -aún los alternativos a los CFC pueden contribuir al efecto invernadero.
- Compra productos reciclados y reciclables como papel higiénico, servilletas y papelería.
Reduce tu impacto personal
- Cada vez que uses tu carro, piensa si puede transportar a alguien más, un solo viaje en el carro es mejor que dos.
- Cuando salga de compras lleva tu propia bolsa o canasto, o reutiliza bolsas de plástico.
- Cuando te sea posible, compra por bultos o paquetes grandes; esto ahorra empaques y te ayuda a economizar dinero.
Escoge tus productos cuidadosamente
- Compra vegetales y frutas que estén en temporada, esto te ayuda a reducir los costos al no comprar importados y promueve la agricultura de tu región.
- Reemplaza una vez a la semana una de las comidas de carne por una vegetariana. Cuando se cultiva granos o vegetales la tierra produce 10 veces más proteína que cuando se practica ganadería.
Informacion recuperada de tips en www.wwf.com
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